En
la Residencia de Atención a la Diversidad Funcional 'Sierra de Loja'
tienen un pedacito del Sáhara. Lo tienen todo el año desde que
conocieron a Brahim y Mohamed, pero lo viven con toda su alegría en
verano, cuando acogen a estos dos pequeños de la wilaya de Auserd. Los
menores llevan dos veranos siendo acogidos dentro del conocido programa
'Vacaciones en paz', pero no se alojan en una casa cualquiera sino en un
centro que sabe cómo atender desde la más absoluta naturalidad la
realidad y las necesidades de las personas con diversidad funcional.
Desde
semanas atrás a su llegada, los residentes esperan con impaciencia que
comience su estancia veraniega en 'Sierra de Loja', propiedad del
Ayuntamiento y gestionada por el grupo Alfaguara. Y este año, como ya
ocurriera el verano pasado, la residencia -pionera en la acogida de
niños con diversidad funcional- ha organizado una fiesta benéfica en
colaboración con las asociaciones 'Amigos del Sáhara' de Granada y
'Vientos de Libertad' y el Ayuntamiento de Loja. El objetivo, como la
primera vez: recaudar fondos para el Centro de Personas con Discapacidad
de Auserd.
Cientos de lojeños acompañaron a los pequeños Brahim,
Mohamed y Mustafá (que este año se ha incorporado al programa) en la
fiesta para su centro, en los campamentos de Tinduf. Y tampoco faltaron
autoridades como el alcalde de Loja, Joaquín Camacho, la diputada
provincial de Bienestar Social, Olvido de la Rosa, o el propio
presidente de Diputación, José Entrena.
A los pequeños, que
tienen un seguimiento médico exhaustivo durante su estancia en Loja, no
les falta el entretenimiento. En el centro lojeño están realizando
actividades adaptadas para ellos y todas las mañanas asisten a los
campamentos de verano del área de Deportes del Ayuntamiento. Pero, sobre
todo, están rodeados del cariño y la atención sin límites de toda la
familia de la residencia 'Sierra de Loja', que espera que más centros
pongan su gratito de arena para unas 'Vacaciones en paz'.
En la
fiesta, profesionales y residentes de la 'Sierra de Loja', colaboraron
con su mercado de productos artesanos y de la huerta, con una cuidada
decoración y con muchos talleres y puestos, a los que también se sumaron
diversas asociaciones de mujeres de la comarca. No faltaron los
sorteos, el baile, la diversión infantil y hasta una jaima para esta
fiesta de ayuda al pueblo saharaui. Además, María Olcina presentó la
película documental 'El rostro de un pueblo olvidado' y también se hizo
entrega de las donaciones del proyecto Puzzles Soldiarios y de Edukdance
a este centro de Auserd.