Estados Unidos presiona para poner fin a la ocupación marroquí del Sáhara Occidental

Por Suzan Scholt/ ECS 

La República Árabe Saharaui Democrática (RASD) fue proclamada en 1976 por el Frente Polisario, después de que el poder colonial de España se retirara del territorio conocido como el Sáhara Occidental. La RASD controla la parte oriental del territorio, mientras que Marruecos ocupa la parte occidental, incluida la capital, El Aaiun. 

La RASD fue aceptada como un Estado miembro de la Unión Africana en 1982, y las Naciones Unidas han estado tratando de negociar un acuerdo pacífico durante décadas. Las organizaciones de derechos humanos citan la supresión frecuente de la disidencia por parte de las fuerzas de ocupación marroquíes, muestra de ello los incidentes del pasado 19 de julio cuando multitudes se congregaron en la calle para celebrar la victoria de Argelia en fútbol, un país que apoya el movimiento de independencia.

Los últimos acontecimientos trágicos en el Sáhara Occidental que llevaron al brutal asesinato de una joven profesora de inglés son una alarma de alerta para que la comunidad internacional pida a Marruecos que ponga fin a su ocupación ilegal de la última colonia de África.

Cientos de saharauis han sido golpeados, reprimidos y torturados por reunirse pacíficamente en su tierra natal desde la invasión de Marruecos en 1975.

¿Qué provocó la brutalidad esta vez? ¡Un partido de futbol!

Cuando Argelia ganó la Copa Africana de Naciones al derrotar a Senegal el mes pasado, los saharauis salieron a celebrar el trofeo. Miles de fanáticos comenzaron a marchar por el bulevar Smara en El Aaiun, ondeando banderas argelinas y cantando "One, two, three, viva l'Argelie!"

Pero luego apareció otra bandera: la bandera de la República Saharaui, entonces las fuerzas de ocupación marroquíes lanzaron un asalto brutal contra los fanáticos usando gases lacrimógenos, mangueras de agua, balas de goma y vehículos. Sabah Othman Ahmida, una joven de 24 años que enseñaba inglés, fue atropellada y asesinada intencionalmente por dos vehículos policiales, según numerosos observadores. El asalto y el abuso contra los saharauis continuó durante días.


"Personalmente he presenciado cómo representantes de Marruecos se enfurecen cuando ven esa bandera saharaui. Afortunadamente para mí, esto sucedió en la seguridad del edificio de las Naciones Unidas. Solo fui detenida e interrogada por cuatro guardias de seguridad de la ONU cuando la delegación marroquí intentó sacarme de la sede de la ONU. Mi delito: acababa de testificar ante la Cuarta Comisión pidiendo a las Naciones Unidas que continuaran con su referéndum prometido durante mucho tiempo o que llamaran a Marruecos a retirarse del Sáhara Occidental.

Después de testificar, fui al fondo de la sala para tomar una foto con algunos estudiantes universitarios saharauis. Mientras tomaba la foto, saqué una pegatina donde ponía la palabra "Sáhara Occidental Libre" que tenía una pequeña bandera saharaui impresa. Esto ofendió tanto a la delegación marroquí que me acusaron falsamente de agitar una bandera saharaui y pidieron a los guardias que me expulsaran. Solo fui detenida brevemente, aunque los guardias de seguridad confiscaron mi calcomanía."

¿Por qué los funcionarios marroquíes se enfurecen tanto cuando ven la bandera de un país que niegan que existe? Es porque representa a la República Saharaui elegida democráticamente, una nación que respeta el estado de derecho, la justicia, la libertad de expresión y la reunión pacífica, y cuya constitución afirma la igualdad de derechos para las mujeres, la libertad religiosa y una economía de libre mercado. Quizás, lo más ofensivo es que la bandera saharaui representa el gobierno legítimo del Sáhara Occidental, reconocido por la Unión Africana y más de 80 naciones.

Marruecos ha obstruido todos los intentos de la ONU de administrar un referéndum libre, justo y transparente sobre el Sáhara Occidental. En cambio, Marruecos intenta vender su propio plan de "autonomía". El Reino ha intentado influir en los Estados Unidos, donando millones de dólares para cabildear y apoyar a la Fundación Clinton, y otras fundaciones de Washington DC.

Hillary Clinton se convirtió en la única Secretaria de Estado de Estados Unidos en respaldar el plan de autonomía marroquí. El candidato presidencial Donald Trump calificó los tratos de Clinton con Marruecos como "corrupción" y tuiteó: "Los dos favores oficiales de Hillary a Marruecos resultaron en 28 millones de dólares para la Fundación Clinton #DrainTheSwamp".

No se puede confiar en el Reino de Marruecos para proporcionar autonomía a la gente del Sáhara Occidental cuando ni siquiera puede mostrar moderación durante la celebración de un partido de fútbol. Es hora de honrar a Sabah Othman Ahmida y tantos otros saharauis asesinados y 'desaparecidos' y poner fin al dominio marroquí.

A menos que la comunidad internacional tome las riendas de la independencia, el pueblo saharaui seguirá siendo brutalizado en su propia patria, y habremos evitado que florezca una democracia musulmana prooccidental en el Mahgreb.

A los entusiastas cánticos de los fanáticos del fútbol saharaui de "One, two, three, viva l'Algeria!", Agrego otro: "Uno, dos, tres, que el Sáhara Occidental sea libre".